La satisfacción de los clientes depende en gran medida de la calidad de los productos o servicios que proveen las empresas. Las empresas con políticas de calidad tienen el marco para la aplicación de un Sistema de Gestión de Calidad que optimiza la operación, con independencia del sector o la actividad de las organizaciones. Conoce más sobre Calidad en las empresas y Certificaciones ISO.
Calidad en las empresas
La calidad en las empresas no sólo es una herramienta, sino una cultura y un método de trabajo que orienta la forma de pensar y actuar de una organización. Una política de calidad debe estar basada en un alto compromiso de dirección y con una orientación hacia los productos y servicios que producen.
Garantizar la calidad y la seguridad de los productos está directamente vinculado con el éxito de la empresa. La calidad es un factor importante que produce satisfacción en los clientes, empleados y accionistas, y dota de herramientas prácticas para una gestión integral. En la actualidad es necesario cumplir con los estándares de calidad para poder competir en un mercado cada vez más exigente; por ello se debe buscar:
- Mejora continua,
- Satisfacción de los clientes
- Estandarización
- Control de los procesos.
Certificaciones ISO
Los parámetros de calidad con los que se maneja la empresa no es algo que deba quedar en la mente o en las agendas de los gerentes. Es necesario que estén escritas en un documento formal que sirva de guía para toda la organización.
Las certificaciones ISO identifican a las empresas comprometidas tanto con las normas de calidad como con los sistemas de gestión de la calidad necesarios para cumplirlas. La obtención y el mantenimiento de la certificación se basan en un sistema de auditorías voluntarias e independientes. Esta responsabilidad ayuda a las organizaciones a mantener y mejorar la calidad de sus productos y servicios.
Se refleja a través de un documento que describe el papel de los tres agentes principales en la Gestión de Calidad según la norma ISO 9001:
#1 Empresa
La Política de Calidad debe alinearse a la realidad de cada compañía. De poco servirá un manual con las mejores intenciones en Gestión de Calidad si éste no responde a las necesidades de la organización. Por ello, el documento nunca debe exagerar ni minimizar nada; todos los elementos incluidos tienen que tener una justificación real.
#2 Mercado o escenario comercial
Las dinámicas del mercado, así como las políticas de otras empresas, pueden influir en la elaboración de la Política de Calidad. Por ejemplo, es posible tomar como referencia procesos de mejora de otras marcas.
#3 Cliente
La calidad responde, en último término, a las necesidades de los clientes. Al implementar mejoras, las empresas siempre deben tener en mente las necesidades de su público, no sólo en términos del producto en sí mismo, sino de plazos de entrega, servicio postventa, la venta en línea, entre otros.
ISO 9001
La norma ISO 9001 establece los criterios de un sistema de gestión de la calidad y es la única norma de la familia que puede certificarse (aunque no es un requisito). Puede ser utilizada por cualquier organización, grande o pequeña, independientemente de su campo de actividad. De hecho, hay más de un millón de empresas y organizaciones en más de 170 países certificadas según la norma ISO 9001.
Esta norma se basa en una serie de principios de gestión de la calidad que incluyen una fuerte orientación al cliente, la motivación e implicación de la alta dirección, el enfoque por procesos y la mejora continua. Estos principios se explican con más detalle en los principios de gestión de la calidad de ISO.
6 Ventajas de las empresas con políticas de calidad
Las empresas con políticas de calidad con un Sistema de Gestión de Calidad pueden:
- Satisfacción del cliente. Entrega de productos o servicios de forma consistente que cumplan con los requisitos que se hayan establecido.
- Reducción de costos. Mejora continua en los procesos y la resultante eficacia operativa.
- Mejor relación. Teniendo la política clara entre todas las partes, permite una mejor relación y sin equívocos entre personal, clientes y proveedores.
- Legalidad. Entendimiento del impacto de los requisitos legales y reglamentarios en la empresa y sus clientes.
- Gestión de riesgos. Mayor consistencia y trazabilidad de los servicios y productos.
- Credenciales de negocio demostrables para la verificación independiente frente a las normas reconocidas.